Entre las décadas de 1920 y 1930, la leche en botella de vidrio se convirtió en la norma en todo el mundo. Fue entregado en su puerta, fresco y envuelto por vidrio frío. Después de su uso, estas botellas se limpiarían y dejarían en la puerta principal para ser recogidas y reutilizadas. Ésta era la práctica común. En el Reino Unido, de hecho, el 94% de la leche se embotella en vidrio, muchos de esos recipientes pertenecen a Dairy Crest, líder en la industria láctea del país. En 2012, este número se redujo al 4%.
Esto podría deberse, en parte, a la invención de los refrigeradores y su creciente presencia en los hogares de clase media. Como la leche ahora podía conservarse más tiempo, se necesitaban menos entregas de leche. La segunda explicación de esta caída podría ser la decisión de los supermercados a finales del siglo XX de vender alternativas más baratas a las botellas de vidrio: los envases de plástico. Ciertamente, progresivamente después de eso, la gente encontró nuevas formas de envasar leche como cartones y bolsas, todas más baratas y fáciles de transportar que su antepasado a base de arena. Con esto, la relevancia de la leche en botella de vidrio se desplomó lentamente.
A pesar de todo, hasta el día de hoy algunos todavía prefieren estos receptáculos clásicos por la experiencia que brindan. Parecería que, para ellos, las opciones de plástico y cartón que figuran hoy en nuestros supermercados nunca podrían superar la sensación de leche fresca goteando en la lengua desde el cuello fresco y suave de las botellas de leche más tradicionales. De hecho, cuando en 2014 Dairy Crest anunció que no venderían más leche en botella, el público británico reaccionó con poemas nostálgicos. Reveló que de hecho había una especie de misterio reconfortante en estos contenedores, recordó que podría haber poder en la simplicidad.
Para brindar apoyo a los productores de leche en botella de vidrio mientras continúan difundiendo la felicidad, Aquatech-BM ofrece la ayuda necesaria para limpiar adecuadamente todos sus recipientes. Las lavadoras de botellas de esta empresa son asequibles, fabricadas para durar y de acuerdo con los estándares industriales, además de fáciles de usar. Además, gracias al bajo consumo de agua de estas máquinas ecoenergéticas, los usuarios reducirán su huella de carbono al elegir una alternativa más ecológica al lavado a mano de grandes cantidades de platos.
Seguramente, estas lavadoras de botellas ahorrarán a los productores de leche en botella un tiempo y dinero valiosos.